martes, 24 de marzo de 2020

Hay tantos tipos de confinamiento como tipos de personas


Hay tantos tipos de confinamiento como tipos de personas y situaciones familiares.

⇛ Hay parejas de jóvenes teletrabajando y dedicando el tiempo libre a ocio en casa: deporte, ver series, juegos de mesa… Quizá lo lleven mejor, pero en realidad no lo sabemos.

⇛ Hay padres teletrabajando en casa con hijos pequeños y se les hace tarea casi imposible. Estos suelen acabar el día agotados y exhaustos, sin un segundo para ellos mismos. Cuando leen cientos de mensajes de que aproveches para hacer deporte, leer, etc. alucinarán. Acaban el día agotadísimos intentando hacer malabares para trabajar y cuidar de los peques que estos días (debido a la situación) suelen estar mucho más demandantes. El estrés laboral y familiar puede ser mayor que trabajando en la empresa.

⇛ Hay quien vive en una casa con jardín (algunos inmensos, otros pequeños), con terraza, con balcones… y hay quien vive en un bajo con ventanas y rejas. A estos últimos, el estrés del confinamiento puede ser peor por la falta de aire libre y la falta de sol.

⇛ Hay padres separados con hijos, quienes han decidido por el bien de éstos, que sus hijos estén con uno sólo de los progenitores y se están echando mucho de menos. Al estrés de la situación, se le añade el estrés por no poder verse.

⇛ Hay quien tiene que salir a trabajar poniéndose en riesgo y quizá hacer horas extras… estos días hablaba con una cajera de supermercado que me confesaba que tenía que tomar ansiolíticos para poder salir de casa y soportar el día de trabajo. Al estrés de las horas de confinamiento se le añade esta presión tan brutal.

⇛ Hay sanitarios, muchos sanitarios que están sufriendo mucho. Que al llegar a casa no pueden conciliar el sueño. Que viven con el miedo constante de volver contagiados. Que acaban el día con ampollas en los pies por trabajar tantas horas con los equipos de protección. Y hay quien no tiene equipos de protección. Para ellos estoy convencida que el confinamiento debe ser lo de menos. El miedo, la presión y la situación tan dura que están viviendo es posible que les esté creando ya problemas emocionales importantes.

⇛ Hay quienes están a gusto en familia y lo están disfrutando… hay quienes tenían una problemática de pareja o familiar previa tan grande que el confinamiento está siendo una verdadera cárcel. Y no quiero olvidarme de aquellas mujeres que están sufriendo violencia de género. Confinadas cada día sin poder salir ambos puede ser una bomba de relojería. El otro día una mujer me confesaba que no sabía cómo realizar una sesión por teléfono o Skype si tenía allí a su pareja todo el día, quien no sabía que asistía a terapia.

⇛ Hay quienes ya en el segundo día de confinamiento sufrió un ERTE, un despido… al estrés del confinamiento se le añade el estrés económico.

⇛ Hay quien sigue saliendo a comprar el pan cada día, hay quienes deciden cumplir el confinamiento a raja tabla (aunque eso signifique no comer pan o adaptarse con la compra que hizo antes del confinamiento). El nivel de autoexigencia de cada uno también es distinto. 

⇛ Y no nos olvidemos de los niños, quienes también sufren el estrés. Si bien tienen una capacidad de adaptación mucho mayor que la nuestra, también lo están sufriendo (PERO ESTO LO DEJAMOS PARA OTRO POST).


En cualquier caso, el mensaje es claro. No hay un único tipo de confinamiento. No nos dejemos confundir con ese “mensaje único” que se extiende por las redes.
Es importante analizar cuál es nuestra situación y qué nos está produciendo más estrés. En el siguiente post hablaremos sobre la relación de esta situación con el trastorno por estrés o el trastorno por estrés post-traumático.

viernes, 20 de marzo de 2020

Psicología, Psicopedagogía y Logopedia Infantil


Esta semana nos gustaría poder aclarar las dudas en relación a los diferentes servicios que, desde el área infantil, ofrecemos en nuestro centro. Y es que son muchas las demandas que nos encontramos frecuentemente del estilo: “No sé exactamente si tengo que pedir información de psicología, logopedia o psicopedagogía”.

Así pues, y a fin de esclarecer las posibles dudas relacionadas con estas disciplinas, vamos a intentar describir brevemente cuáles serían los objetivos y áreas de intervención dentro de cada una de ellas.

En primer lugar, debemos dejar claro que se tratan de disciplinas distintas, muchas veces relacionadas, pero que el/la profesional que las lleva a cabo ha de tener nociones concretas de cada una de ellas: No todo psicólogo sabe de psicopedagogía o no todo logopeda sabe de psicopedagogía por ejemplo.

PSICOLOGÍA VS PSICOPEDAGOGÍA:
La psicología en sí se trata de una ciencia que abarca una amplia gama de sub-disciplinas como son la psicología clínica, la de las organizaciones, la de la salud, el deporte,… Entre las cuales se encuentra la psicología educativa, en la que podríamos englobar la psicopedagogía.
Así pues, la psicopedagogía se encargaría del estudio en concreto del aprendizaje y los procesos implicados en este, así como sus posibles disfunciones, a lo largo del desarrollo de la vida de cualquier persona.
En cambio, la psicología en sí sería la ciencia que, tal y como Wundt ya empezó a estudiar en su laboratorio en el 1879, englobaría el estudio del desarrollo, la personalidad, la conducta y los procesos mentales en sí de los individuos y grupos en distintas situaciones de la vida y el día a día de cualquier persona.
Por lo tanto la psicopedagogía se encargaría específicamente de los procesos mentales implicados en el aprendizaje como pueden ser la motivación, la atención, la cognición,… Y la psicología info-juvenil se encargaría de abordar la conducta, la personalidad, el desarrollo,… de los infantes y adolescentes.

PSICOPEDAGOGÍA VS LOGOPEDIA:
Por otro lado encontramos la logopedia, que es la ciencia especializada en los procesos de comunicación humana y de la deglución y motricidad oro-facial. Así pues, en este caso muchas veces existen dudas entre el límite de la dificultad de aprendizaje y la dificultad del lenguaje. ¿Cómo sabemos entonces si un caso requiere de una intervención logopédica o de una intervención psicopedagógica?
Como todos los casos, será necesario valorar las dificultades de forma individual pero, a grandes rasgos, priorizaremos la intervención logopédica para aquellos casos que presenten dificultades en la voz, el habla, el lenguaje verbal, oral y escrito así como también el lenguaje no verbal y el uso del lenguaje en sí. Por lo tanto, debemos distinguir las dificultades en el proceso de aprendizaje de las dificultades relacionadas puramente con el lenguaje en sí para saber qué tratamiento escoger.

Esperamos que este post os haya podido aclarar vuestras dudas o bien os haya aportado información de vuestro interés. 
Aún y así, si quisierais saber más información al respecto o quisieras solicitar información en concreto sobre alguno de nuestros servicios podéis poneros en contacto con nosotras y os daremos información de forma más detallada en relación a vuestra consulta.

Anaïs Rodríguez Ruiz
Psicóloga Col. 24228
Creixement Global